13.4 (III) En Espíritu y en Verdad

III. Debemos insistir en esta Verdad: “Porque era agradable a Dios, fue amado de Él, y como vivía entre pecadores fue trasladado . Se lo llevó para que la maldad no trastornara su inteligencia ni la perfidia extraviara su alma. Pues la fascinación por el mal anubla el bien, y el vértigo de la pasión pervierte a un alma limpia . Llegado a la perfección en poco tiempo , llenó el espacio de una larga carrera. Y pues su alma era agradable al Señor, por eso se apresuró a sacarle de un ambiente corrompido. La gente lo ve, pero no lo comprende ni se da cuenta de esto: que para los elegidos del Señor hay Gracia y Misericordia, y para Sus santos, protección” (Sab 4:10-15). A la que debemos apostillar con este entendimiento: - Que “el que procede con justicia y habla rectamente, el que rechaza ganancia violentada, el que sacude su mano para no oír planes sanguinarios y cierra sus ojos para no ver el m...