¿No reconoces a tu Dios?

“Sólo en ti se halla Dios; no hay ningún otro, no, no hay otro Dios. Sí, en ti hay un Dios escondido” (Is 45:14-15). "Dios es el que obra en vosotros tanto el querer como el hacer, según Su beneplácito" (Filip 2:13): ése es tu Dios. Incluso para los que creen ser ateos, ése es su Dios. Tu Dios es ese Espíritu que está al gobierno de tu razón y actúa como CENTRO DE GRAVEDAD que ejerce una fuerza de atracción irresistible hacia sí mismo: aquello que buscan tus ojos y tus oídos y en lo que tu lengua encuentra satisfacción y regocijo a través del habla es tu Dios, que obra en ti el querer y el hacer . La razón “razona” para el cumplimiento de los fines de ese espíritu que la gobierna, pues, aunque lo ignore por falta de ejercicio de su conocimiento consciente (inercia), es ese espíritu el que actúa como centro de gravedad que, como tal, ejerce una fuerza de atracción irresistible sobre todo su Ser (cuya manifestación es pensamiento, palabra, obra y omisión), al tiempo...