1 (I) El esclavo no sabe lo que hace su Señor

I. “El esclavo no sabe lo que hace su Señor” (Jn 15:15) y precisamente por eso es esclavo. “El entendimiento no extrae sus leyes (a priori) de la naturaleza, sino que se las prescribe a ésta”, "leyes según las cuales un entendimiento es causa del mundo. Cuando esa determinación de su causalidad se refiere a un efecto en el mundo, que encierra un propósito moralmente necesario, pero inejecutable para seres de sentidos, entonces es posible un conocimiento de Dios y de Su existencia " (Kant [1] ). A diferencia de los animales, que no pueden escapar del sometimiento a las leyes que gobiernan los elementos, sólo al hombre se le ha dado la libertad de poder entender para elegir libremente el estado y destino de su existencia, según entienda o no que Dios, y sólo Él, es el Señor del tiempo interminable en el que prosperan “el conocimiento del alma, la razón que conduce a la verdad, la palabra, la memoria, l...